Desde mayo de 2012 no es necesario solicitar licencia previa para la apertura y el inicio de actividad de establecimientos comerciales minoristas de hasta 300 metros de superficie. Tampoco será necesario solicitar licencia para la mayoría de obras previas de acondicionamiento.
Así, la solicitud de licencias previas de apertura y actividad se sustituyen por la presentación de declaraciones responsables o comunicaciones previas a la actividad, facilitando el inicio y desarrollo de este tipo de negocios en particular y la actividad económica en general.
A través de la citada declaración responsable o comunicación previa se manifiesta de forma explícita el cumplimiento los requisitos exigibles: el pago del tributo correspondiente y disponer, cuando sea exigible, de un proyecto técnico firmado por un técnico competente. Se regula, además, la tramitación conjunta de actuaciones relacionadas con la misma actividad o local, lo que hasta ahora requería trámites independientes.